No abusemos de la paciencia de nuestro planeta

El uso del aire acondicionado da calor. Y no es una paradoja, pues mientras nuestras viviendas u oficinas se refrigeran, los sistemas de climatización expulsan aire caliente hacia el exterior. Mientras en los países desarrollados se va generalizando el uso de dispositivos de refrigeración, lo que redunda en una mayor calidad de vida, nuestro medio ambiente se va deteriorando de forma progresiva.

Numerosos estudios apuntan al aire acondicionado como responsable de la subida de un grado en la temperatura de las ciudades a ciertas horas del día. Uno de ellos se refiere en concreto a Madrid, a las horas de la tarde y a barrios dénsamente poblados. El calor que emiten al exterior nuestros sistemas de aire acondicionado se concentra en el ambiente de una manera alarmante.

Uno de los factores clave en este fenómeno es el empleo del gas conocido como HFC, uno de los causantes del efecto invernadero. Hasta ahora, este gas era esencial para el funcionamiento de los dispositivos de aire acondicionado, y aunque su concentración en la atmósfera no es muy elevada, comienza a preocupar a los expertos. Las nuevas tecnologías han dado con gases menos dañinos, que ya se están utilizando en algunos sistemas de refrigeración.

Como resultado de esta situación, es importante apostar por la eficiencia energética. Los avances que las empresas están poniendo a disposición de los usuarios permiten utilizar los dispositivos de climatización de forma racional, y en este contexto se inscriben termostatos inteligentes y dispositivos de domótica como uno de nuestros kits para convertir en inteligente tu aire acondicionado controlado por infrarrojos. Estos sistemas de domotica domestica o de oficina, consiguen ahorros en la factura de hasta el 30% y la correspondiente reducción de emisiones a la atmósfera.

 

 

Tenemos que crecer de forma sostenible, usar nuestros avances, pero con responsabilidad y acceder a las nuevas tecnologías que no sólo piensan en nuestro bienestar. Debemos conocer cuándo es efectivo utilizar el aire acondicionado, así como acomodar la temperatura a nuestras necesidades. Por supuesto conocer las inercias térmicas, apagar cuando estamos fuera de cassa, o que nuestra casa «marche» en «piloto automático» conociendo nuestra posicion por GPS. En definitiva, usarlo menos y mejor: esa es la manera más idónea de ahorrar no solo en la factura, sino en disgustos a nuestro Planeta.

 

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.